ESPAÑA EN EL IMPERIO ROMANO

EN LA PENÍNSULA IBÉRICA (1000 a.C- 476 d.C)

-       Protohistoria (1000 – s.III a.C)

-       Hispania romana (s.III a.C – 555 d.C)

La protohistoria recibe este nombre porque se produce en la convivencia de pueblos con escritura con pueblos sin escritura. Estos pueblos sin escritura son pueblos autóctonos y son fundamentalmente dos: Celtas e íberos. Mientras que los íberos son una cultura más desarrollada que presenta hasta un arte propio (dama de Elche, Bicha de Balazote, etc.). Los celtas son una cultura menos desarrollada, con una economía de subsistencia que se organiza en ciudades fortificadas (Numancia, Los Castros Gallegos, etc.). Los pueblos escritores, provienen del exterior y son tres: Fenicios, griegos y cartagineses. Llegan a la península y se quedan en la costa del sur y de Levante, donde fundaran factorías para comercializar con la población autóctona, lo que va a provocar cambios en la población autóctona. Un ejemplo de los cambios: La civilización tartessa. En esta situación aparece en el s.III a.C. Un nuevo protagonista que es Roma. En estos momentos, Cartago tienen cada vez mayor poder comercial en el Mediterráneo occidental. Por esta razón, Roma va a enfrentarse a Cartago en una serie de guerras que llamamos guerras púnicas. La primera guerra púnica (264-236 a.C.), en esta primera guerra resulta vencedor Roma, por lo que Cartago debe pagarle un tributo. Para poder pagar este tributo, Cartago necesita nuevas riquezas y va a invadir el Sur y el Este de la península Ibérica. Esto no gusta a Roma, que va a presionar a Cartago para que firme el tratado del Ebro (226 a.C.); según el cuál, el norte del Ebro es para Roma y el sur para Cartago. Sin embargo Roma firma un tratado con una ciudad cartaginesa, Sagunto; Cartago envía un ultimátum a Sagunto para que deshaga esta alianza con Roma, estos se niegan, y Cartago declara la guerra a Sagunto y Roma declara la guerra a Cartago como aliado de Sagunto. Empieza así la 2ª guerra púnica (219-201 a.C.). En esta 2ª guerra púnica, Asdrúbal Barca ataca la península ibérica desde donde un ejército al mando de su hermano Aníbal, con de elefantes, se coloca a dos días de Roma atravesando Pirineos y Alpes; Aníbal, en vez de atacar a una Roma indefensa, espera unos días, dando tiempo a Roma a organizarse, para luego vencer al ejército de Aníbal, el cual huirá; más tarde, Publio Cornelio Escipión “el Africano”, va a España y vence a Asdrúbal, acabando así la 2ª guerra púnica. A partir de aquí, la parte cartaginesa de la península pasa a ser de Roma y lo divide en dos provincias, la Ulterior y Citerior. Posteriormente habrá una tercera guerra púnica, en la que Roma ataca Cartago, la arrasa y la cubre de sal. Esta guerra ocurrió a finales del s.II a.C.

GUERRAS LUSITANO-CELTÍBERAS (155-136 a.C)

Los lusitanos, actualmente portugueses. En cuanto a la guerra, los romanos habían firmado unos pactos, unos tratados de no agresión entre ellos. Los romanos, querían la guerra, por ello, lo que van a hacer es provocar a los lusitanos para que ellos les declaren al guerra. En aquella época, los caminos comerciales estaban llenos de ladrones, por lo que no eran seguros. Los romanos acusaron a los lusitanos de estos atracos. Cada vez que estos atracos ocurren, Roma acusará a los lusitanos de haber cometido estos. Llega  un momento en el que los lusitanos se cansan de los romanos, y les declaran la guerra. Los lusitanos van a estar acaudillados por Viriato, y van a lograr resistir las emboscadas de los romanos e incluso estar a punto de derrotarles. Sin embargo, Viriato va a ser traicionado por tres de sus generales, que son sobornados por Roma. De este modo, Viriato es entregado a Roma, y los romanos lo van a matar. Una vez muerto Viriato, los tres generales se dirigen a cobrar la recompensa, y el centurión (Galba), les dice que Roma no paga a traidores. Estos tres generales van a ser asesinados. Así Roma, consigue vencer a los lusitanos, y pasará a ocupar gran parte de la península.

De forma paralela, Roma había firmado un tratado con los pueblos celtíberos, que formaban una confederación de ciudades abiertas. En estos tratados, Roma prometía no atacar, pero a cambio, las ciudades no podían amurallarse. El problema fue que una de las ciudades, Segeda, se iba a sentir amenazada por Roma y va a amurallar su ciudad. Al romper Segeda el pacto, Roma declara la guerra a Segeda, y automáticamente, las ciudades amigas de Segeda, le declaran la guerra a Roma también. De esta guerra es característico el asedio a la Cuidad de Numancia, que lo van a conseguir aguantar. En el momento que van a ser derrotados en la última guerra, los ciudadanos restantes, prenden fuego a la ciudad y se suicidan. Al terminar las guerras se ocupa toda la zona de Celtiberia que se una a la provincia Citerior. De este modo, solo queda el norte por ser conquistado.

GUERRAS CANTABRAS-ASTURES (29-19 a.C)

Gobernando Octavio Augusto, decide este completar la conquista de la península, y mandará tropas a conquistarla. Guerra muy costosa porque los pueblos de la zona vivían muy separados, y el ejército romano era tacado mucho por pequeños grupos de personas armadas. Roma consigue conquistar toda la península y el norte se une a la península Citerior.

Una vez terminada la conquista, el emperador divide la provincia Ulterior en Lusitania y Bética, que van a ser senatoriales (bajo el control directo del senado). Citerior era una provincia imperial (bajo el dominio directo del emperador) para poder controlar la acción mienra. Con esto queda terminada la conquista.

En el s.III, Caracalla crea una nueva provincia en la península, que es la Gallaecia. También en el s.III, Piocleciano divide lo que quedaba de la Citerior, en dos provincias, que son Tarraconensis y la Cartaginensis, quedando la península dividida en 5 provincia: Carganiensis, Tarraconensis, Gallaecia, Bética y Lusitana.

ROMANIZACIÓN EN HISPANIA (ESPAÑA)

La romanización no va a ser igual en todas partes. En el caso de la península, va a ser mayor en el sur y en el Este de la península, a medida que subimos hacia el norte, la romanización es menor. Los pueblos del Norte pagaban impuestos, pero no eran romanizados (Astures, Cántabros y Vascones).

Lo romanos aportan a Hispania lo siguiente:

1)   Una serie de obras públicas (Alcantarillado, acueductos, anfiteatros, etc).

2)   Toda una red de calzadas.

3)   El derecho, todo nuestro derecho, en gran parte, actualmente, esta basado en el derecho romano.

4)   El latín, lengua madre de todas las lenguas actuales, excepto del euskera.